domingo, 21 de abril de 2013

Fin

Esta noche he intentado hablar con una persona y no he sido capaz.
Creo que hay pocas cosas tan dolorosas como no poder comunicar con alguien. Sentir la necesidad y... nada.
Me he sentido angustiado. Y luego ya no.
Qué triste.
Necesitaba contar mi fracaso, el último, y al rato ya no. No merecía la pena.
Me he dado cuenta de las consecuencias y he pensado "esto sí que es el fracaso".
Parecería que es uno más pero no. Lo noto distinto. Tiene algo de definitivo que otras veces no estaba.
He decidido algunas cosas y entre ellas cerrar el blog.
Me he cansado de llevar la cuenta de pequeños fracasos, de anotarlos, de contarlos.
Nada más.



5 comentarios:

  1. Es que cansa! Yo lo veo más un lugar donde diluirlos, no? compartir, olvidar,renovar,imaginar, nos gusta leerte ...

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  2. A mi también me gusta mucho leerte y no te olvides de como empezó este blog, nada que ver con los fracasos!!!

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  3. fracasos... acaso los fracasos no son sólo una huella dentro de nuestro natural proceso de cambio? dramáticos, sí. pero efímeros, instantáneos, sobrevalorados, útiles sólo cuando nos excusan a no avanzar, a no progresar...
    parte del presente. que es inmediato recuerdo. aprendizaje. progreso. y, contradictoriamente, triunfo.

    a mi también me gusta leerte. Supongo que porque, en parte, hay veces que también me leo...

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  4. ¿Y dónde acudiremos para unas lecciones extra de Plague ahora que ya tenemos todas las armas biológicas posibles?
    ¿Y qué será de nuestro diletante? ¿le pasara como a Holmes que tuvo que resucitar por aclamación?

    De momento he decidido poner fin a este comentario

    Pero sólo temporalmente

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